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¿Cómo Catar un Aceite de Oliva Virgen Extra?

Cómo Catar un Aceite de Oliva Virgen Extra

¿Cómo Catar un Aceite de Oliva Virgen Extra?

Catar un aceite de oliva virgen extra implica seguir un proceso de evaluación sensorial para apreciar sus características.

En las catas de aceite de oliva se utiliza una copa de base ancha que favorece la concentración de los aromas en la boca y se cubre con el vidrio de reloj que impide que los aromas se dispersen antes de tiempo. Los vasos de cata que se utilizan en paneles profesionales son de vidrio oscuro ya que el color del aceite no es indicativo de calidad.

Un buen aceite de oliva extra virgen es fresco, frutado, equilibrado, amargo y picante, con aromas herbáceos, notas de almendras, hierba verde y tomate.

Acá te contamos de manera simple cómo podés elegir aceites de buena calidad.

  1. Observación visual: Comienza por observar el aceite de oliva virgen extra en un recipiente de cristal transparente. Fíjate en su color, que puede variar desde un verde intenso hasta tonos dorados. También presta atención a su claridad y viscosidad.
  2. Evaluación del aroma: Acerca el recipiente a tu nariz e inspira suavemente. Identifica los diferentes aromas que percibes, como notas frutales, hierbas, tomate, almendra o incluso matices más complejos. Trata de describir los aromas que percibes y su intensidad.
  3. Templar el aceite: Sujeta el recipiente entre tus manos para calentar ligeramente el aceite. Este paso ayuda a que los aromas se liberen más fácilmente y puedas percibirlos de manera más clara.
  4. Saborearlo: Toma una pequeña cantidad de aceite y llévalo a tu boca. Permite que recorra toda la cavidad bucal, prestando atención a su textura y consistencia. Percibe si es suave, sedoso, denso o ligero. Deja que el aceite se distribuya por toda la lengua.
  5. Descriptores del sabor: Mientras mantienes el aceite en la boca, enfócate en los sabores que percibes. Identifica sabores primarios como frutas, hierbas o nueces, y también sabores secundarios como amargura o picor. Evalúa la persistencia de estos sabores una vez que hayas tragado el aceite.

Recuerda que cada persona puede percibir los aromas y sabores de manera ligeramente diferente, por lo que es importante confiar en tus propias percepciones.

¡Disfruta del proceso y permite que tus sentidos te guíen en la cata del AOVE!

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